El 24 de marzo de 1962, ante un gran despliegue humano en el aeropuerto Internacional El Plumerillo. Con las primeras horas de la tarde tocó pista el avión Caravelle, recientemente adquirido por Aerolíneas Argentinas y todavía no incorporado oficialmente al servicio.

En la aeronave, un pasajero distinguido: el presidente de la República, doctor Arturo Frondizi, invitado de honor a la fiesta y la coronación de la reina.

Acto sacramental, Bendición de los Frutos y un espectáculo con calor popular animado por Juan Carlos Thorry, cuya locución logró que el acto eleccionario transcurriera en medio de la algarabía de la muchedumbre.

Instantes culminantes y los ojos verdes de Wanna Pegorín, depositaria del mandato encomendado por el pueblo de Luján, llorando de alegría y felicidad al conocer la buena nueva: acababa de ser aclamada la Reina de la Vendimia 1962.